(Foto: M. Helfenbein, Yale University / OPAC)
(Foto: M. Helfenbein, Yale University / OPAC)

El ha sido el punto de partida de muchas teorías entorno a su capacidad para, supuestamente, generar un , o muchos de ellos, que no harían más que ir tragándose al planeta hasta que no quede nada más que oscuridad.

Sin embargo, ¿qué tan cierto puede llegar a ser esto? Desde que comenzó a operar en el año 2008, muchos científicos y curiosos se preguntan si en realidad se puede crear agujeros negros microscópicos.

Tras encenderlo, la NASA lanzó un reporte en donde discrepaba notoriamente con las noticias sensacionalistas que hablaban de la posibilidad de que este colisionador sea el origen del fin de nuestro modesto planeta y de la humanidad, claramente.

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“El encendido del mayor y más potente acelerador de partículas del mundo, cerca de Ginebra (Suiza), no desencadenó la creación de un agujero negro microscópico. Y ese agujero negro no empezó a succionar rápidamente la materia circundante cada vez más rápido hasta devorar la Tierra, como habían sugerido las noticias sensacionalistas”, señaló la NASA.

Pero también es preciso señalar que la posibilidad de que el Colisionador de Hadrones cree agujeros negros minúsculos no es de cero. No se sabe a ciencia cierta si lo hará o no y en caso de hacerlo, demostraría lo fácil que son crearlos y lo común que deben ser en nuestra desconocida naturaleza universal.

Según una publicación de la revista Forbes en el año 2016, es muy probable que estos agujeros negros de tamaño microscópico existan por todos lados, mencionando además que en este terrible y hermoso universo tiene muchos más peligros acechando a nuestra frágil y curiosa humanidad.

Este es el Gran Colisionador de Hadrones del CERN (Foto: Getty Images)
Este es el Gran Colisionador de Hadrones del CERN (Foto: Getty Images)

“Estos agujeros negros, si existen, habrían estado bombardeando la Tierra (y todos los planetas) durante toda la historia de nuestro Sistema Solar, así como el Sol, y no hay absolutamente ninguna evidencia de que algún cuerpo de nuestro Sistema Solar se haya convertido en un agujero negro o haya sido devorado por uno”, decía Forbes.

La teoría actual demuestra que no debemos preocuparnos por la existencia de agujeros negros en la Tierra, aunque tampoco hay que descartar que el ser humano cree uno en un laboratorio y esto traiga consecuencias catastróficas. La idea si bien es muy remota, es posible.

Por otro lado, tal parece que el Gran Colisionador de Hadrones no tiene lo necesario para crear este tipo de astros, al menos no uno que resulte peligroso para la humanidad y nuestro rocoso hogar, pero quizá uno más grande en el futuro sí pueda representar más que un risible riesgo.

“Es difícil imaginar que algo así ocurra en nuestro relativamente pequeño planeta, pero no es imposible”, señala al respecto The Next Web, asegurando además que el colisionador actual no es el más grande que podría construirse en el futuro.

Una de las formas de desencadenar un agujero negro tiene que ver mucho con la reacción en cadena de fusión fría, algo que provocaría una especie de mini Big Bang en nuestro planeta. Sin embargo, el detalle es que esta fusión fría es solo hipotética en estos tiempos, por lo cual no es necesariamente peligrosa.

Los túneles del Gran colisionador de hadrones. (Imagen: google.com)
Los túneles del Gran colisionador de hadrones. (Imagen: google.com)

Por ello, no debemos temer a que nuestro Colisionador de Hadrones terrestre va a terminar con la existencia de la humanidad o del Sistema Solar, al menos no por ahora, pero en unos años ¿quién sabe?

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