Vanguardia y revolución II, David Flores-Hora [Opinión]

El mayor logro de la exposición Zona ciega: aproximaciones a la vanguardia en el Perú es la mirada historicista, el interés de Augusto del Valle por escribir historia del arte y plantear un relato canónico.

Existen tres ejes claros en la muestra: la zona de deriva iconográfica, la zona de frontera y la zona de producción de grupos de arte. Estos capítulos convierten el proyecto en una apuesta didáctica y reflexiva.

Uno de los artistas que tiene –sistemáticamente– la mayor visibilidad y presencia en el periodo 1975-1979 es Francisco Mariotti. Desde sus instalaciones como Aire de libertad o Lavatorio artificial hasta su vínculo con E.P.S. Huayco, Mariotti aporta mucho a lo que hoy llamamos lo contemporáneo.

Sin embargo, en esta exposición también se pueden ver rescates, como las piezas de Seiji Asato, Alejando Romualdo o el registro de la Carrera de chasquis de Luis Arias Vera. Además, la muestra resalta la importancia de Herbert Rodríguez como uno de los artistas más importantes en nuestros días.

Indudablemente, esta exposición del ICPNA es una de las mejores del año.