Carlos Ascues y Jean Deza no fueron considerados para el choque ante Ayacucho FC. (Foto: GEC)
Carlos Ascues y Jean Deza no fueron considerados para el choque ante Ayacucho FC. (Foto: GEC)

Alianza Lima tropezó nuevamente pero esta vez frente a Ayacucho FC. Perdió de visita por 2 a 0, es 15° con 4 puntos luego de un triunfo, un empate y dos derrotas en cuatro fechas. El peor arranque de Bengoechea dirigiendo los íntimos en el torneo local.

A los victorianos no se les dan los resultados y su juego sigue siendo criticado. Antes, el técnico podía hacerles frente a las críticas con triunfos en la mano. Alianza incluso, se podía dar el lujo de ser uno de los equipos con el arco más abatido porque, finalmente ganaba y hacía goles.

La actualidad es diferente. El cuadro blanquiazul no pasa por un buen momento, incluso, recibe golpes extra futbolísticos por actitudes de algunos de sus jugadores.

Antes de empezar el Torneo Apertura, el equipo se reforzaba con figuras como Jean Deza y Carlos Ascues. Contrataciones que generaban polémica por la mochila que podían traer en sus espaldas.

Sin embargo, la administración decidió apostar, continuar con el negocio. Reforzarse con titulares talentosos y confiar en que lo demás, era cosa del pasado. Por ahora, no ha funcionado y no voy a discutir si los jugadores pueden o no divertirse en su día libre. Voy a evaluar, si prescindir totalmente de dos de sus principales contrataciones es una determinación que pueden asumir.

Está claro que la sanción es una buena y coherente decisión, que a largo plazo, sentará bases éticas que repercutirán positivamente en el equipo. Pero, por el momento Alianza pasará por un proceso que sumado a su bajo rendimiento, podría seguirlo afectando, pero que deberá sortear para poder avanzar.

Como en la vida, todo negocio tiene un riesgo y el fútbol no es ajeno a ello.