La estrella juvenil Justin Bieber se había quejado, vía Twitter, que le robaron su computadora y una cámara fotográfica que contenía fotos personales, durante uno de sus conciertos.
Ayer, viernes, se supo que todo este escándalo solo habría sido un truco publicitario elaborado por el propio cantante para promocionar el lanzamiento de su nuevo video musical, Beauty and a Beat, en el que aparece con la polémica Nicki Minaj.