Eduardo Fujihara dice que cocinar es un acto creativo, y también un homenaje. Por eso, desde decidió celebrar los 120 años de la inmigración japonesa en el Perú de una manera especial: disfrutando de su gastronomía, de esa cultura que encontramos en la comida nikkei.

El 8 de abril de 1899 llegaron a Perú los 779 primeros migrantes japoneses. En la actualidad, se calcula 100 mil familias nikkei en el Perú, una de las comunidades japonesas más grandes de Latinoamérica.

Hanzo, dice Fujihara, quiso cerrar el año agradeciendo y rindiendo honores a Perú y Japón con un menú degustación de cinco tiempos que es delicado, exquisito y que está perfectamente acompañado de vinos seleccionados por el sommelier Christian Llerena.

“No queríamos que los 120 años pasen desapercibidos. La gastronomía peruana es una mezcla de muchas culturas, entre ellas la japonesa. Creo que un aporte clave del lado nikkei ha sido el cuidado y el tratamiento del pescado, la técnica del corte. El tiradito es ese gran ejemplo, donde el corte es preciso y especial”, dice el cocinero, con una gran sonrisa. Eduardo Fujihara ama su trabajo y lo disfruta inmensamente. Hanzo es su orgullo y un reto constante, como la vida misma.

Este menú empieza con un tiradito kiiro que Eduardo observa con admiración. Lleva tako karague (pulpo crocante) y papel de arroz en tinta. Perfecta manera para iniciar. El viaje es fascinante, y el sakana en salsa de shitake nos cautiva: es un filete de pescado bañado en salsa de hongos japoneses, ajo y mantequilla. Eduardo te pide que cierres los ojos y sientas los sabores. Llegan los postres, y siempre los vinos, donde Llerena remarca que la comida con un buen maridaje es simplemente perfecta. Y así es la experiencia en Hanzo: perfecta.

DATO

- Hanzo está en la Av. Primavera 1494, Surco. El precio del menú degustación es de 320 soles para dos personas. Va todo diciembre.

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