Reducen penas de los involucrados en feminicidio de Solsiret Rodríguez

En 2016, la joven activista Solsiret Rodríguez fue asesinada. Su cuerpo -cercenado- recién fue encontrado tres años después. Si bien en junio del 2022 su asesino fue sentenciado a 30 años, ahora el Poder Judicial redujo su pena.

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Se trata de Kevin Villanueva Castillo, cuñado de Solsiret, quien fue condenado por feminicidio a 30 años de cárcel, pero el Poder Judicial lo absolvió del crimen de feminicidio y lo condenó a seis años de cárcel por el delito de encubrimiento personal y real.

En esa línea, su condena solo será hasta febrero de 2026. Además, está obligado a pagar 20 mil soles a favor de los deudos y seis mil soles al Estado.

Quien fuera pareja de Kevin, Andrea Aguirre Concha, también fue absuelta del delito de feminicidio, pero su condena de 28 años de cárcel fue confirmada, aunque bajo la figura de homicidio calificado.

Aguirre Concha deberá pagar 80 mil soles como concepto de reparación civil en una plazo de tres años.

Bryan Villanueva Castillo, expareja de Solsiret y padre de sus hijos, en 2022 también fue condenado a tres años y cuatro meses de cárcel por el delito de encubrimiento real. La madre de este y suegra de Solsiret, Yolanda Castillo García, también recibió la misma pena, pero la sentencia de ambos fue revocada por el Poder Judicial.

Lamenta decisión del PJ

Carlos Rodríguez, padre de Solsiret, lamentó la reducción de penas de los involucrados en el crimen de su hija.

“Para mí, la justicia en el Perú es una utopía, no existe. Es una palabra puesta como un letrero en una tienda”, expresó el padre a RPP.

Feminicidio

En 2022, el Ministerio Público indicaba que el crimen de Solsiret fue un feminicidio “porque se cometió en un ambiente de acoso sexual por parte de Kevin Villanueva, quien realizaba tocamientos indebidos a la víctima cuando vivían en el mismo departamento”.

Asimismo, señaló que “los resultados de los exámenes médico, antropológico y odontológico forense respaldaron la teoría del Ministerio Público de que el descuartizamiento lo realizaron dos personas (Kevin y Andrea), antes y después de la muerte de la víctima, usando herramientas como serrucho, taladro y cuchillo, con la intención de desaparecer el cuerpo”.

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