Congreso debate investidura de Pedro Sánchez, quien pide terminar bloqueo en España y defiende diálogo en Cataluña. (AFP)
Congreso debate investidura de Pedro Sánchez, quien pide terminar bloqueo en España y defiende diálogo en Cataluña. (AFP)

Redacción PERÚ21

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El líder socialista español, , pidió este sábado al Congreso de los Diputados su investidura como presidente del Gobierno para terminar con el bloqueo político y aseguró que sus pactos sobre la región de no romperán el país.

“No se va a romper , no se va a romper la Constitución. Se va a romper el bloqueo” que impidió formar Gobierno tras las elecciones de abril, repetidas en noviembre, afirmó Sánchez en su intervención para solicitar el voto al inicio de la sesión de investidura en el Congreso.

“El gobierno va a trabajar para superar el conflicto político en Cataluña [...] El diálogo siempre dentro de la Constitución será una prioridad absoluta”, insistió el actual jefe de gobierno en funciones.

Sánchez insistió en que, tras el voto de noviembre, no es posible “otra mayoría parlamentaria” que la coalición progresista que su partido ha construido, y reprochó a la oposición de derecha que no haya contribuido “a la gobernabilidad”. Los españoles no han votado parálisis”, recalcó.

El dirigente socialista, actual jefe del Ejecutivo en funciones, reconoció la existencia de tensión independentista en Cataluña, pero subrayó su objetivo de buscar soluciones políticas y dejar de tratarla exclusivamente por medios judiciales.

“Nos vamos a esforzar por dialogar con todos, evitando el insulto”, afirmó.

Sánchez estableció como objetivos “gobernar con una mirada progresista, alcanzar acuerdos amplios en temas de Estado y reducir la tensión territorial”, rechazando el machismo, la xenofobia, la homofobia y el racismo.

Sánchez estableció como objetivos “gobernar con una mirada progresista. (AFP)
Sánchez estableció como objetivos “gobernar con una mirada progresista. (AFP)

También lamentó que los políticos en España llevamos demasiado tiempo” dedicados a discusiones menores sin centrarse en “problemas capitales”, como la lucha contra la pobreza, la sostenibilidad de las pensiones de jubilación o los problemas demográficos del interior del país.

En este sentido, reprochó que “quienes invocan el patriotismo” en la derecha, en defensa de la unidad nacional, no se preocupen tanto por el bienestar social.

Este es el discurso de Pedro Sánchez:

El debate debe alargarse hasta el martes cuando se prevé el fin de la parálisis iniciada con la celebración de las elecciones de abril, el posterior fracaso en la formación de un gobierno y la repetición de los comicios el 10 de noviembre.

Primera fuerza con 120 diputados, los socialistas del PSOE buscan un gobierno junto a la izquierda radical Podemos (35 diputados) con un programa social, ecologista y feminista.

El grupo parlamentario socialista aplaude al primer ministro provisional español, socialista Pedro Sánchez. (AFP)
El grupo parlamentario socialista aplaude al primer ministro provisional español, socialista Pedro Sánchez. (AFP)

- “No se va a romper España” -

En un fragmentado Congreso de 350 diputados, Sánchez perderá la primera votación del domingo, que requiere mayoría absoluta, y deberá esperar al martes en una segunda tanda donde le bastarán más síes que noes.

Estos los tiene asegurados gracias al respaldo o la abstención de varias formaciones regionales, entre ellas los independentistas catalanes de Izquierda Republicana de Cataluña (ERC).

Estos acordaron con el PSOE “una mesa de diálogo” entre el gobierno y las autoridades regionales cuyos acuerdos se someterán “a consulta de la ciudadanía de Cataluña”.

Entre abucheos de la bancada opositora, el socialista abogó por “retomar la única vía posible, la política” y “dejar atrás la deriva judicial que tanto dolor ha causado”.

En una agria réplica, el líder del conservador Partido Popular (PP), Pablo Casado, arremetió contra un “gobierno Frankenstein” formado por “comunistas” y “separatistas”.

Se ha convertido en el líder de la coalición que quiere acabar con la España constitucional”, criticó.

Los ataques continuaron con la intervención de la ultraderecha Vox, aupada como tercera fuerza, cuyo líder Santiago Abascal lo acusó de “traición”, “mentiroso”, “estafador” o “villano de cómic”.

Pedro Sánchez abogó por “retomar la única vía posible, la política” y “dejar atrás la deriva judicial que tanto dolor ha causado”. (AFP)
Pedro Sánchez abogó por “retomar la única vía posible, la política” y “dejar atrás la deriva judicial que tanto dolor ha causado”. (AFP)

- La crisis en Cataluña -

El auge del independentismo en Cataluña desde los alrededores de 2010 desembocaron en una larga crisis en España, cuyo peor momento fue el fallido intento de secesión de octubre de 2017.

A mediados de octubre, nueve dirigentes separatistas recibieron altas penas de prisión por esos hechos, sentencia que desencadenó fuertes protestas, en ocasiones violentas, en la región.

El principal penado, con 13 años por sedición y malversación, fue el dirigente de ERC, Oriol Junqueras.

Desde otras formaciones separatistas como Juntos por Cataluña (JxC), del expresidente Carles Puigdemont, se oponen al pacto del que deben participar al liderar el gobierno de coalición regional.

El auge del independentismo en Cataluña desde los alrededores de 2010 desembocaron en una larga crisis en España. (AFP)
El auge del independentismo en Cataluña desde los alrededores de 2010 desembocaron en una larga crisis en España. (AFP)

En su intervención, el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, advirtió que “sin mesa de diálogo, no hay legislatura”, recordando que ya precipitaron la convocatoria electoral de abril de 2019 al no apoyar los presupuestos socialistas.

En minoría y en un contexto de fragmentación y polarización, algunos analistas cuestionan la estabilidad del que será la primera coalición de gobierno desde el fin de la dictadura de Francisco Franco (1975).

Desde los círculos empresariales mostraron preocupación por las medidas de su programa, como la subida de salarios e impuestos o la derogación parcial de una reforma para liberalizar el mercado laboral, en plena desaceleración del crecimiento económico.

Llegado al poder en junio de 2018 con una moción de censura contra el conservador Mariano Rajoy, Sánchez aumentó el salario mínimo un 22%, apostó por el feminismo con un gabinete con 11 ministras y exhumó a Franco de su monumental mausoleo cerca de Madrid.