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El lienzo "Los jugadores de cartas" de Paul Cézanne fue adquirido por la familia real de Qatar por US$250 millones de dólares, con lo que se convirtió en el cuadro más caro vendido en una subasta, informó el diario Expansión.
El nuevo récord en el mercado del arte desbanca como obra más cara al cuadro de Picasso "Desnudo, hojas verdes y busto", que se subastó en 2010 en Christie's por 81.9 millones de euros.
El rey de Qatar compró la obra de Cézanne al multimillonario griego George Embirikos, quien durante décadas se divirtió rechazando ofertas. El magnate murió en 2011 y, según Vanity Fair, poco antes de su muerte abrió las conversaciones sobre la venta, conversaciones que fueron culminadas por sus herederos.
La operación se cerró a finales de 2011 pero no se había dado a conocer hasta ahora.
