La imagen de James Holmes en su primera aparición ante un tribunal de Colorado (EEUU), por la masacre que desató en el estreno de la última cinta de 'Batman' en la localidad de Aurora, daba muestras que el llamado 'Asesino de Denver' tiene extraños comportamientos.
El homicida –quien lució una melena naranja, ojos desorbitados y extremo cansancio en la corte– escupe constantemente a sus custodios, por lo que ellos deben llevar máscaras cuando lo trasladan para diversas diligencias, informó ABC News.
Cuando fue detenido y trasladado al Jefatura Superior de Policía de Arapahoe, Holmes afirmó ser el Guasón, archienemigo del 'hombre murciélago', y se quedó sentado mirando una pared blanca, pero hacía gestos con sus cejas como si tuviera espasmos.
The Huffington Post reveló que Holmes, de 24 años, compró un potente rifle después de fallar una prueba oral en la Universidad de Colorado el pasado 7 de junio y que, tres días después, abandonó los estudios del doctorado de neurociencias que cursaba.
Muchos creyeron que Holmes acudió a la corte drogado pero eso no es cierto, según ABC News. Esto lleva a pensar a los expertos que puede haber sufrido un "episodio psicótico", que está agotado por el estrés o que simplemente fingiendo.