Corea del Norte advirtió que no cambiará de política con su nuevo líder, el joven Kim Jong Un, quien acaba de suceder a su difunto padre al frente del país, indicó la agencia oficial KCNA.
"Declaramos de forma solemne a los responsables políticos necios del mundo, entre ellos los de Corea del Sur, que no esperen el más mínimo cambio por nuestra parte", indicó la Comisión Nacional de Defensa en un comunicado.
Pyongyang también descartó cualquier posibilidad de discusión con Seúl. "Como ya dijimos, nos seguimos negando a establecer vínculos con el traidor Lee Myung-bak y su grupo", añadió la mencionada Comisión, considerada la estructura más poderosa del país, que aludió en esos términos al presidente surcoreano.