(Opinión) Mariana Alegre: Cien años de retroceso

Cuando ya parece que no se puede estar peor, desde el Congreso de la República aprueban el predictamen del Proyecto de Ley 1520-2021/CR que propone la “Ley de protección del embarazo de la madre gestante y del niño por nacer dentro del entorno familiar”. De ser aprobada, esta ley pone en riesgo a las mujeres cuyas vidas están en riesgo producto de distintas enfermedades o embarazos ectópicos. Además, ataca en particular a las mujeres, niñas y adolescentes que se enfrentan –demasiado jóvenes– a los peores momentos de sus cortas vidas, luego de haber quedado embarazadas producto de una violación. La congresista Rosangella Barbarán, autora de este proyecto, decide que las vidas de niñas, adolescentes y mujeres que se encuentran con su salud en grave riesgo o que han pasado por una execrable violencia sexual son irrelevantes. Que bien pueden morirse o vivir traumatizadas recordando para siempre a su violador, pues le quiere otorgar al concebido la misma categoría jurídica que a la gestante y, por lo tanto, limitar la aplicación del aborto terapéutico.

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Como es obvio, tan flagrante violación de los derechos humanos de las mujeres no cuenta con la opinión técnica ni del Ministerio de Salud ni del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables. Tampoco cumple con los estándares internacionales que nos permitan, a las mujeres, acceder a los servicios de salud sexual y reproductiva. De no ser observado este proyecto de ley por el presidente Pedro Castillo, el Perú se consagraría como el país que odia a las mujeres.

Para colmo, hace pocos días se perpetró también un atentado contra la educación sexual integral en el currículo nacional. La mayúscula estupidez de quienes quieren desproteger a los niños y niñas y dejarlos vulnerables ante el abuso sexual y el riesgo de tener embarazos prematuros es incomprensible. Según la Defensoría del Pueblo, al 15 de junio de 2022 hay 518 niñas, menores de 14 años, que han tenido un hijo en condiciones forzosas y riesgosas. Así también, entre enero y abril han sido 2,283 los casos de violación sexual en niñas y adolescentes. Esta es una situación espeluznante que parece no importar a estos congresistas.

Para terminar la semana en el país que odia a las mujeres y no acepta la diversidad sexual, la cadena de cines Cineplanet anunció en la sinopsis de la película Lightyear, tanto en la web como en paneles impresos en sus locales, que en la cinta habría escenas con “ideología de género”. Esto porque una pareja de mujeres se da un beso.

Quienes aplauden tremenda tontería no solo revelan lo homofóbicos que son, sino que, además, suele coincidir que son ellos mismos quienes no dicen ni pío cuando miembros de iglesias abusan de niños y niñas. ¡Una vergüenza Cineplanet!

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