[Opinión] Andrés Romaña: Tropezar cien veces con la misma piedra.
[Opinión] Andrés Romaña: Tropezar cien veces con la misma piedra.

La victoria de Lula en Brasil pinta el continente de rojo –salvo Ecuador, Paraguay y Uruguay– y demuestra que Sudamérica podrá tropezar cien veces con la misma piedra, pero no aprenderá la lección.

En las últimas décadas, Sudamérica se ha caracterizado por estar conformada por países “en vía de desarrollo”. Sin embargo, aquel concepto parece no ser una situación temporal, sino un estancamiento permanente del continente. Cada cierto tiempo, cuando un país comienza a crecer y reducir su pobreza, su población decide tirar por la borda todo lo avanzado y saltar al vacío.

Un ejemplo es Chile, uno de los países más desarrollados de la región y con la tasa más baja de pobreza en 2019. Ese año, su población decidió incendiar el país y promover una constituyente para cambiar lo que ellos denominaban un sistema “desigual”. Tres años después y Chile es un país más pobre, más desigual y con menos oportunidades. Lo mismo sucedió en Venezuela en 1998, su población decidió destruir el país con Chávez por su hartazgo hacia los políticos que ellos mismos eligieron. Aquella parece ser la conducta habitual latinoamericana: tumbar la casa porque no funciona bien el baño.

Con todo el continente rojo, no cabe duda que en unos años seremos más pobres, desiguales y autoritarios que lo que somos ahora. Pero el problema no es ese, sino que, en ese momento, intelectuales paternalistas, sociólogos de izquierda y una población irresponsable culparán a la guerra, a la pandemia o a la conquista española por la crisis que se estará viviendo. Porque los sudamericanos se han acostumbrado a culpar a cualquier factor externo por sus desgracias políticas, en vez de hacerse responsables de sus decisiones en las urnas y de las atrocidades económicas que aplauden. Puro victimismo.