[Opinión] Andrés Romaña: ¿Hasta cuándo? (Foto de Ernesto BENAVIDES / AFP)
[Opinión] Andrés Romaña: ¿Hasta cuándo? (Foto de Ernesto BENAVIDES / AFP)

El régimen corrupto de Pedro Castillo se derrumba ante las gravísimas declaraciones de colaboradores eficaces que revelaron ayer medios de comunicación. Según un colaborador eficaz, Castillo habría coordinado un pedido de asilo en Venezuela para el prófugo Bruno Pacheco. Además, también habría ordenado que se apaguen las cámaras de seguridad de Palacio de Gobierno para que no quede registrada la reunión con el exsecretario prófugo.

Las revelaciones de ayer generaron que diversos antifujimoristas irracionales demuestren que su antifujimorismo es oposición al apellido, mas no a los delitos. Una prueba es que, luego de que se revelara que Castillo habría entregado puestos públicos a bancadas a cambio de votar en contra de la vacancia, varios periodistas y analistas aseguraron que eso era un “acuerdo político” y que “no se debe criminalizar la política”. Pero curiosamente, esos “periodistas” son los que gritaban “repartija” cada vez que el Congreso intentaba elegir a los magistrados del Tribunal Constitucional o al Defensor del Pueblo. Curioso ver a antifujimoristas defender el transfuguismo, el saqueo del erario público, la destrucción de instituciones y el copamiento del Estado; resultaron ser peor.

La permanencia de Castillo en el cargo es institucionalmente insostenible. La población no puede seguir adormecida mientras el Perú se encuentra secuestrado por congresistas tránsfugas que permiten todo. Si el presidente Pedro Castillo continúa en el cargo en las próximas semanas, será una señal de que el Perú fracasó como república. Porque aquello significará que los representantes políticos le dieron la espalda al país y a la Constitución que juraron defender. Y mientras más tiempo permanezca Castillo, mayor será la destrucción institucional.