¿Cómo es el mapa de la criminalidad en la región? Empecemos con el norte, Ecuador.

Lo que ha ocurrido es impresionante. Nada novedoso, en el sentido de que se ha matado a un candidato a la Presidencia hace unos meses. Los mismos, dicho sea de paso, que son los artífices de lo que acaba de ocurrir. El origen de esta crisis en particular es que el nuevo presidente —quien sí tiene un plan, a diferencia de nuestro gobierno, que no tiene ninguno— planteó una serie de medidas de aislamiento total de los presos. Eso es lo que ha precipitado esta crisis. Y las organizaciones criminales que operan en Ecuador tienen controladas las prisiones. Ha habido más de 500 muertos en prisiones ecuatorianas en los últimos dos o tres años. Y no por acción de la represión estatal, sino por enfrentamientos entre grupos.

Son dos cárceles que están juntas en Guayaquil. Y han anunciado que construirán dos más.

Sí. Al momento de conversar, están tomadas. Y hay otra cárcel en Ambato que también está tomada. El gobierno ha dicho que no va a negociar la libertad de los guías o agentes penitenciarios, que están de rehenes. El gobierno decretó estado de emergencia tras una fuga y salieron los militares a raíz de los motines. Y ahí se armó el bolondrón que hemos visto y la búsqueda de rehenes de distinto tipo, incluso periodistas, universitarios y dicen que hasta estudiantes de colegio. Es muy, muy grave para ellos, pero también para nosotros. Ecuador, y en especial Guayaquil, a través del Puerto de Esmeraldas, se ha convertido en una especie de plataforma de exportación de las drogas hacia el norte. Un hub de exportación. Por cierto, otro puerto en riesgo es Paita. Los Choneros, por ejemplo, que ya están, dicho sea de paso, en Piura, están vinculados al Cártel de Sinaloa. Los Tiguerones me dicen que ya están en Tumbes. Y Los Lobos están vinculados al Cártel de Jalisco Nueva Generación. Ojo que son organizaciones multiactividad, ya no mono. No hay sicarios a tiempo parcial. Las zonas de minería ilegal aluvional se superponen con las de siembra de cocaína. Y más allá, hacia la triple frontera, operan remanentes de las FARC.

Estamos rodeados por todas las fronteras. Están los colombianos del gota a gota.

Tenemos organizaciones criminales ya no solamente vinculadas a los venezolanos. También están los brasileros del Comando Vermelho y del Primer Comando Capital. Estos dos tienen décadas controlando el microtráfico en las grandes ciudades brasileras. De ahí comenzaron a controlar rutas un poco más grandes. Y ahora entran al Perú para, desde ahí, tener el control de toda la operación. Entonces, estamos enfrentando un problema de seguridad nacional de gran magnitud. Creo que es difícil que le vaya demasiado bien al gobierno ecuatoriano. Pero si le fuera bien, van a expulsarlos hacia acá. Un amigo colega me comentaba que hay 60 pasos ilegales, solo en la parte de Tumbes de la frontera. Y a eso hay que agregarle la parte de Cajamarca y la del Amazonas. Es una coladera. Así como aparentemente hubo contrabando de armas robadas del Ejército hacia allá, tengo la impresión de que pasan por ahí y regresan por ahí. Nunca ha habido en la historia de América Latina una migración masiva hacia el sur, ni siquiera pequeña. Las migraciones masivas han sido siempre al norte, hacia Estados Unidos. Y sabemos lo difícil que es para los Estados Unidos controlar esas migraciones. Imagínense ahora lo que será para el sur.

¿Por qué no se ven grandes capos o cárteles peruanos?

Lo que pasa es que este mapa (ver recuadro) que ha elaborado el exviceministro del Interior, Ricardo Valdés, es de organizaciones internacionales. Las organizaciones peruanas son montones, cientos, pero más chicas y con menos conexiones internacionales. Pero interactúan con ellos. Estas organizaciones internacionales controlan mucho más ahora el mercado de drogas. Te respondería que en el Perú no somos capaces de asociarnos sin fragmentarnos para nada. Mira la política y mira las bancadas del Congreso. Acá hay pequeños emprendimientos criminales. Antes eran pequeños clanes familiares los que recopilaban la droga. Cosas intermedias. Ahora está cambiando todo. Las organizaciones criminales peruanas son mucho más fragmentadas. Por eso, quien crea que acá se puede enfrentar al crimen como lo ha hecho El Salvador es un ingenuo. Por muchas razones, pero, entre otras, porque allí eran una o dos organizaciones criminales archiconocidas desde hace 20 años. Golpeabas ahí y se acababa todo.

Ecuador ha reaccionado mejor que el gobierno peruano.

Tenemos un problema gravísimo de crimen organizado urbano, de extorsión, de trata de blancas, de madera ilegal, de narcotráfico y de minería ilegal. Lo que ha pasado en Pataz, por ejemplo, es una vergüenza que da cuenta de que la Policía está muy desmoralizada y mal entrenada, porque no tienes que matar a la gente para poder mantener a un grupo de presos. Si la Policía ya no puede trasladar detenidos, si no tiene esa capacidad, estamos en un momento difícil. Y si la Policía no puede cuidar al hijo de la presidenta porque se queda dormida, entonces creo que hay problemas urgentes de moral y de entrenamiento.

¿Qué copiaría del Plan Fénix?

Yo creo que la idea de prisiones de alta seguridad. Y también la idea de fortalecimiento de la inteligencia en investigación criminal. Pero le están poniendo US$800 millones. Ecuador es un país chico que no es muy rico. Su Policía es más pequeña, sus problemas son más pequeños. ¿Qué hemos hecho nosotros? ¿Qué han hecho el gobierno y el Congreso? ¿Qué esfuerzo adicional se ha hecho para enfrentar un problema de esta gravedad, como la minería ilegal? Nada. Con lo que hay se sigue actuando. Y eso es bien peligroso.

No solo es desidia. La minería ilegal está representada en el Congreso, por ejemplo.

Ah, por supuesto. Yo creo que en el Congreso hay muchísimas modalidades del crimen en el país. Empezando porque hay 83 congresistas investigados por la Fiscalía y demás. No es casual que hayan reducido la eficacia de la colaboración eficaz. Están pensando en ellos mismos, pero no se dan cuenta de que eso va a favorecer a los narcos. El gobierno ha tomado decisiones para que quien no pueda justificar su situación salga del Reinfo (Registro Integral de Formalización Minera). Tendrían que expulsar al 90%. Pero ellos van a defenderse con todo. Y con un gobierno débil y un Congreso cómplice, puede pasar cualquier cosa.

También hay minería ilegal en el sur. Bolivia tiene puro oro peruano.

Claro, de Nasca hacia el sur, por ejemplo. También están los sitios donde convierten el oro ilegal en legal. La diferencia que hay entre las cifras de producción de oro y de exportación de oro de Bolivia es de 95%. Todo eso es de Perú. Parte del oro peruano también va para Ecuador. Ojalá que se mantenga a los policías en las fronteras. Además, tienes que cambiarlos cada cierto tiempo, porque el nivel de corrupción es inmenso. Son economías que mueven US$4 mil millones. El oro está a más de US$2 mil la onza. Y el costo de producción del minero ilegal es muy bajo, porque es totalmente invasivo al medio ambiente y tiene cero protección social para el trabajador. Pero eso no nos puede paralizar.

Los ecuatorianos donan víveres a las Fuerzas Armadas. Acá no somos conscientes.

Acá, a diferencia de otros países de América Latina, tenemos tanto hartazgo con la política que ya no salimos a protestar. A la marcha por la seguridad de Capeco y la CGTP fue poca gente.

¿Qué le parece la amnistía a policías y militares en Ecuador?

Es una barbaridad. Si le dices a cualquier efectivo del orden en cualquier parte del planeta que, haga lo que haga, luego va a ser amnistiado y perdonado… pues te meto un balazo en la cabeza y ya. Para eso deroga los códigos y que no haya leyes. Es una barbaridad irracional que refleja el clima de terror que viven allá.

¿Qué tanto afectaba el nuevo Código Procesal Penal a la hora de capturar a criminales? ¿Hay demasiados policías en áreas administrativas?

Sí, también. Y sobre el nuevo Código, ya lo cambiaron. Algo de eso había. Además, la Fiscalía no estaba en condiciones de exigir nada por esto que ha pasado. Pero también es cierto que los partes se vendían. Estabas detenido y te ofrecían parte o atestado. Si era parte, chau, compadre. Si era atestado, te jodiste. Hay policías fabulosos que jamás van a hacer una cosa así, pero también hay una masa crítica enorme de los otros. Son soluciones relativas. Hay una idealización de las instituciones que controlan el sector penal. Es muy ingenuo. Ninguna funciona bien del todo. Ni la Policía ni el Poder Judicial, ni el Ministerio Público, ni el INPE. Todo el circuito tiene problemas muy serios. Y hay un déficit presupuestal. Es verdad que la Policía tiene equipos de altísima capacidad y gente de primera. Pero necesitamos el triple de esos agentes especializados. Acaban de salir 5 mil policías de las escuelas. Tú puedes agarrar a 800 de esos muchachos y darles formación intensiva en tres meses. Y luego para estas funciones. Y luego se aprende en la práctica. Hay que exigirle al gobierno que haya seriedad presupuestal.

Desde las cárceles se dirigieron las revueltas. ¿Y en nuestras cárceles hacinadas?

El hacinamiento en las cárceles siempre es un factor que ayuda a que los prisioneros tomen el control. En Ecuador ha sido completo. En el Perú es muy parcial. Pero tú necesitas prisiones de verdad grandes para meter a los de crimen organizado, totalmente aislados, con tecnología, con personal tratando de que sea incorruptible.

Antes fue el Tocorón, cárcel del Tren de Aragua en Venezuela. Ahora las de Guayaquil. ¿Luego las prisiones peruanas?

Lo de Venezuela solo se puede explicar con la complicidad del régimen de Maduro. Porque ahí hay discoteca, piscina… No hay forma. Mira, yo creo que después de las cosas gravísimas que hubo en la época de Sendero… ¿te acuerdas de ‘Alias La Gringa’? Se ha logrado un cierto control de las cárceles basado en una mejor gestión del INPE y una tolerancia de que los presos hagan más o menos con libertad lo que quieren hacer… Con toda sinceridad, no ha habido un solo incidente grave en 20 años. Es más grave lo de las fronteras y las ciudades.

Hay medidas para deshacinar. No encarcelar a los que tienen juicio de alimentos. Y los grilletes electrónicos, que siguen a criterio del juez.

Eso está buenísimo. Juicio de alimentos se come el 80%… Ojo, los grilletes están legislados hace ocho años. Y siguen a criterio. Yo no entiendo por qué los jueces no aplican eso con mayor presteza. Es un buen sistema.

En medio de esta violencia, se cumplió un año de las protestas para reponer a Pedro Castillo.Afortunadamente hubo una marcha pacífica que desdice las intenciones violentistas de los ultras. Acabo de terminar un libro sobre Castillo. Se llama “Pedro de los (casi) 500 días” y ahí muestro que esto se preparó semanas atrás, moviendo a los mineros. Tenían celulares ‘sapito’. Y quien estaba a cargo era Bermejo, quien estuvo en el sur de Ica antes de la marcha, donde hay full minería ilegal.

¿Hasta qué punto hemos vivido algo parecido a lo de Ecuador pero bajo la máscara ideológica de Bermejo y Castillo?

Sí, hay algo de eso. Por lo menos fue el factor definitorio al inicio. Luego ya se convierte en un tema de identidad y llegan las víctimas.

El crimen organizado y la política son aliados.

Bueno, Castillo convocaba a Palacio a los mineros ilegales. Y al Movadef también. No había mayor misterio. Los mineros ilegales tenían muchas expectativas de lo que podían conseguir con Castillo. Creo que en Ecuador también hay una penetración de las organizaciones criminales en la política. No se puede si no... Ojo que la ausencia de violencia no necesariamente es una buena noticia. Quizás están dejando que las cosas funcionen. Quien quiere pasar ilegalmente por las fronteras simplemente paga aquí y allá.

¿Cómo explica la poca respuesta del Ministerio del Interior?

Hay niveles de improvisación muy grandes. Y peleas internas. Por ejemplo, y con todo respeto, el señor ministro del Interior es un hombre muy distante de la vida cotidiana del crimen en el Perú desde 2014. Hace una década se fue a vivir a Estados Unidos y lo han traído de ministro del Interior, habiendo varios candidatos bastante razonables. Policías buenos e inteligentes que no pueden hacer milagros tampoco. Nadie puede solucionar esto en cuatro meses. Entonces, vemos a un hombre que dice que ya pronto agarraremos a Cerrón, que ya mañana, que después… No tiene el impulso emocional ni político de dirigir conflictos con la Policía a cada rato. Y esto del no cambio de colocación. Decían que era imposible hacer los cambios de colocación y al día siguiente lo cambiaron.


“Los Choneros están en Piura, Los Tiguerones en Tumbes y Los Lobos van a entrar”


Estas organizaciones criminales tienen subdivisiones y agrupaciones paralelas.

No soy experto en las subdivisiones y todo eso. Pero lo que hay que decir es que no es solamente que vienen y se imponen. Las bandas interactúan con las organizaciones criminales locales en Colombia, Ecuador, Perú o Bolivia. Y terminan asociándose o enfrentándose, o una mezcla de las dos cosas. Entonces, se van generando relaciones de colaboración y fricción entre estas. Los Choneros están en Piura. Los Tiguerones están en Tumbes. Y yo creo que Los Lobos van a entrar en minería ilegal, que hay en Piura. Puede ser en extorsión, que también hay. No es que sea imposible contenerlos. Pero eso de que el Plan Boluarte existe y luego de dos meses salen a decir que no existe… Tenemos derecho a conocerlo. ¿Cuál es el plan? ¿Dónde está?

¿Los Lobos podrían entrar en la minería ilegal peruana?

Decía lo de minería ilegal por una razón: porque es mucho más grande en el Perú que el narcotráfico. La minería ilegal hace US$4 mil millones, según nuestro último cálculo. Y el narcotráfico que se queda en el Perú llega a US$1,208 millones. Entre el Vraem y Puno se produce el 60% de toda la cocaína del Perú. Claro que en el punto de llegada vale más; eso no llega acá. Ahora Los Lobos ya están haciendo minería ilegal en el sur de Ecuador, en la provincia de Azuay, que no es muy lejos de la frontera con el Perú. Y, además, nosotros, por nuestro lado, también hacemos minería ilegal en el Marañón, etc., no muy lejos de ahí. Entonces, ellos, que entraron haciendo solo narcotráfico, se diversifican. Entonces, el siguiente paso ¿cuál es? Cruzar y ganar territorios que son muy difíciles de controlar. Y, gracias a la muy poca capacidad de respuesta del gobierno peruano, que siempre es muy reactiva. Y siempre con frases rimbombantes, como la del ministro de Interior señalando en Tumbes ‘no se preocupen, todo está asegurado, nosotros vamos a asegurar’. ¿Cómo nos pueden asegurar algo que no es tan sencillo? Por lo menos que digan que van a hacer el esfuerzo y que tienen un plan. El presidente ecuatoriano, que es nuevo, Noboa, tiene un Plan Fénix.

¿Ecuador es lo que Colombia era en los 90?

Colombia sigue teniendo problemas muy serios, pero de alguna manera se puede decir eso. Ha bajado relativamente. La diferencia con Colombia y Perú es que Ecuador no produce la droga. Podrían hacerlo, pero no, el mercado se abastece con Colombia, Perú y Bolivia.