Terminó el allanamiento en la vivienda del expresidente Martín Vizcarra en San Isidro y, en conversación con la prensa, reafirmó que tiene voluntad de apoyar en la investigación que le sigue el Ministerio Público. También descartó “en absoluto” ser parte de un hecho delictivo.
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En esa línea, dijo que el 21 de febrero presentó un escrito a la Fiscalía donde indicó su deseo de levantar su secreto bancario, bursátil, tributario y de comunicaciones. En ese mismo documento mostró su disposición de que los fiscales visiten su domicilio.
“Pasados unos días no llegó un documento del Ministerio Público donde nos comunicaban que, en función al documento que habíamos presentado, nos acerquemos a la Fiscalía el viernes 8 para firmar un acta donde autorizamos al sistema bancario, a la Sunat, al registro público y operadores de telefonía para levantar todos los sistemas”, expresó el exmandatario.
El abogado Fernando Ugaz indicó que los fiscales se han llevado las laptops y teléfonos celulares de los hijos de su defendido, pese a que trabajan y estudian.
Además, dijo que se llevaron un auto que no estaba en la orden, pero que el mismo Vizcarra dio el permiso a los fiscales para que lo decomisen.
“La incomodidad que se tiene es porque vivo con tres hijos, una trabaja y los otros dos estudian, y toda la información las tienen en sus laptops. Ante su oposición y molestia, les dije que tenemos que acatar. Lo único que le pedí al fiscal es que revisen esa información y cuando vean que es información académica y laboral las puedan devolver”, señaló Vizcarra.
Finalmente, explicó que cuando llegaron los fiscales les abrió la puerta con su ahora “famoso” polo de Micky Mouse, pero que ingresó con el fiscal al dormitorio y le pidió que le permita cambiarse por una camisa.
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