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En el búnker del encarcelado Rodolfo Orellana, en San Borja, se hallaron la semana pasada los sobres lacrados que habían desaparecido durante una diligencia fiscal en julio de 2014.
La fiscal Marita Barreto, a cargo de investigar a la red de Orellana, informó que, durante una diligencia, donde los testigos brindaban sus versiones referentes al reconocimiento de espacios y señalando cómo se operaba en ese lugar, se encontraron las citadas pruebas, aparentemente ocultas, en un espacio poco visible del inmueble.
Las distinto de donde se acopiaron en julio de 2014, por lo que se descarta un olvido.
